Evolucionando mi Rol como Formadora

20 octubre, 2021

2020 fue un año atípico en la vida que conocíamos. 2020 fue el año que vino a enseñarnos que lo que estábamos haciendo debía cambiar y la pandemia nos hizo adaptarnos a una nueva realidad. Aún nos encontramos en este proceso, evolucionar, cambiar, reinventarnos, aceptar que lo que un día fue, ya no volverá a ser, en todos los ámbitos de nuestra vida y la sociedad, la educación por supuesto no está exenta de este impacto, sino al contrario, ha sido de los ramos que menos preparados estaba para afrontar este giro de 180°. 

La tarea de hoy en día, es ganarle el tiempo al tiempo. Cambiar el mindset y tomar esta contingencia y sus retos como una oportunidad de crecimiento, de evolución, como una oportunidad para educar a los ciudadanos del mundo para construir un futuro más incluyente, un futuro con mejores oportunidades de vida para todo el mundo. Pero esto no es tarea fácil, la educación necesita de personas automotivadas, personas que deseen impactar a su entorno más allá de la generación y acumulación de riqueza, que vayan por su autorrealización personal siendo capaces de voltear a ver al que está al lado, de girar hacia su entorno y preguntarse – ¿cómo contribuyo a mejorar esto? ¿cómo ayudo al que está a mi lado o al frente? – 

Para llegar a lo anterior, se vuelve indispensable que los que estamos al frente del aula,  sobre un escritorio, en una institución educativa, tomando decisiones acerca de los planes y desarrollos educativos en todo el mundo, desarrollemos esta actitud, la habilidad de preocuparnos por el que está enfrente de nosotros, de nuestro alumno, considerando sus particularidades, sus necesidades, buscando métodos de enseñanza que los interesen, que incluyan sus diferencias en el aprendizaje, con metodologías y tecnologías tan diversas como nosotros mismos, que podamos ofrecerle valor agregado en nuestras interacciones con ellos sin importar el canal o medio de comunicación que usemos, que tengamos la habilidad de interesarlos en los temas que les queremos transmitir y de los que somos especialistas. Ahora bien, ¿cómo lo vamos a lograr? Preparándonos, evolucionando nuestro ser hacia nuestra plenitud, integrando inicialmente aquello que queremos dar y transmitirlo efectivamente tomando en cuenta que, aunque una pantalla esté enfrente de nosotros, una persona es lo que hay detrás, con la consciencia de que es una persona la que recibe lo que yo estoy dando y lo que estoy dando está formando a ese ser y sus futuras tomas de decisiones. 

Es hora de integrar habilidades humanas, tecnologías, metodologías, ciencia y sueños. Es hora de participar activamente en la solución de los retos actuales y futuros. Es hora de prepararnos hoy, de evolucionar, de desaprender y aprender aplicando el conocimiento hoy para tener un mejor mañana. 

Perfil del autor

Silvia González
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